Acerca de nosotros
1988, Willemstad, Curazao
Van der Valk Curaçao – Cómo comenzó todo
Llegamos con poco más que un manojo de llaves y maletas llenas de sueños.
El sol se ocultaba sobre el mar Caribe, una brisa cálida acariciaba nuestra piel y el ritmo del tambú resonaba en el aire isleño. Así comenzó nuestro viaje en Curaçao: una historia basada en la pasión, la familia y el sueño de crear algo especial.
El inicio de una herencia
En 1989, nuestra familia echó raíces en esta vibrante isla con la apertura del Van der Valk Plaza Hotel, ubicado en el corazón de Willemstad. Marc van der Valk, orgulloso hotelero de tercera generación proveniente de los Países Bajos, lideró el proyecto como director general.
Para nosotros, sus hijos, esta isla se convirtió en nuestro hogar. Crecimos con los pies en la arena y el corazón unido para siempre a la cultura colorida y la belleza natural de Curaçao.
De la visión a la realidad
En 2003, una nueva idea tomó forma: un refugio tropical junto al mar. Ese sueño se hizo realidad con el nacimiento de Kontiki Beach Resort, ubicado a lo largo de la animada costa de Mambo Beach. Diseñado como un santuario de cabañas de madera y lagunas rodeadas de vegetación, Kontiki ofrecía algo único: un lugar donde nadar bajo las palmeras y desconectar en tu propio pedazo de paraíso.
En 2006 abrimos nuestras puertas al mundo.
La pasión de una familia
Hoy somos nosotros—Terence, Justin y Tiara van der Valk—quienes continuamos con el legado. Con un profundo amor por Curaçao y un compromiso firme con la hospitalidad auténtica, tomamos las riendas para guiar a Kontiki hacia su próximo capítulo.
Ahora avanzamos con orgullo bajo un nombre renovado y una nueva visión: The Kontiki. Más que un resort, es el reflejo del sueño de nuestra familia, del espíritu vibrante de la isla y de la cálida bienvenida que damos a cada huésped.
Esto es solo el comienzo—y nos sentimos honrados de escribir la siguiente parte de esta historia usted.
EL MISMO LUGAR DEL CORAZÓN HOY EN DÍA
Y aunque los tiempos han cambiado, The Kontiki sigue siendo hoy ese mismo lugar del corazón. Un destino apacible para el amor y la celebración, para la cultura, la gastronomía y el confort. Aquí, las tradiciones locales se fusionan con un sentido cosmopolita del bienestar, y el arte caribeño de tomárselo con calma se practica a la perfección.
EXCELENCIA FÁCIL Y VIBRANTE.
The Kontiki es un lugar para relajar los hombros y dejar las prisas en la puerta. Disminuya el ritmo y permítanos encargarnos de la excelencia fácil y vibrante por la que somos conocidos.
Terence van der Valk.